martes, 19 de febrero de 2008

oLoR a TiErRa MoJaDa


En medio de aquello, con esas visiones espectaculares y sintiendose el rey del mundo. El olor a plata quemada se mezclaba con el de la tierra mojada, y es que la lluvia se habia hecho presente justo y cuando el caminaba por el medio de ese lugar. A lo lejos vislumbraba algo que parecia ser un arbol. ¿Seria el arbol de la felicidad? o ¿tal vez el de la eterna juventud?. Solo estaba y solo se sentía, sin rumbo fijo, sin camino marcado. Miraba al cielo, pensaba, no habia duda, sabía perfectamente lo que hacer...

1 comentario:

Cristina dijo...

hummm!!! esto me recuerdda que alguien me debía un relato...yo no digo nada...solo lo dejo caer!!!
besitos